El tucumano gasta más en el super

El tucumano es uno de los que más gasta en el país cuando va al super

Con un promedio de operación de $ 239,40 por visita, sólo es superado por el consumidor santafesino
La Gaceta: Domingo 09 de Marzo de 2014:
En: http://www.lagaceta.com.ar/nota/582004/economia/tucumano-uno-mas-gasta-pais-cuando-va-al-super.html

Ivana y Eduardo comienzan un particular rally por el supermercado. Su misión es hallar los “Precios Cuidados” y estirar, lo más que se pueda, el ingreso familiar. Comparan los valores de un mismo producto, pero de distintas marcas, y se dan con un hecho cada vez más común: la mercadería no es del mismo peso; por lo tanto, no hay unidad de comparación. Y siguen paseando por las góndolas. “Hay algunos precios descuidados”, se lamentan.

Algunas cosas han cambiado en la escenografía del supermercado. Según la economista Susana Nuti, el deterioro en la oferta de productos se originó en 2007, cuando el entonces poderoso secretario de Comercio, Guillermo Moreno, motorizó los controles de precios. “Más que el precio, hoy me preocupa la calidad de los productos”, indicó la experta. “Lo que antes te vendían como una mercadería estandar hoy puede ser considerado ultra o plus; y, encima, viene en tamaño más pequeño”, señala más como ama de casa que como economista. Frente a ese escenario, al consumidor le resulta más difícil comparar los productos y tomar una decisión de compra. “Todos estos sistemas de controles de precios no hacen más que perjudicar al consumidor y, particularmente, a los del interior del país que pagan más caro o no llegan, como debiera, los beneficios del programa oficial de Precios Cuidados”, acota.

El “peso” de la compra

En tiempos tormentosos, como los que vivimos desde que a fines de enero se devaluara un 21% el peso, los argentinos suelen adoptar conductas defensivas al momento de adquirir productos. Por caso, el titular de la Cámara de Supermercadistas de Tucumán, Guillermo Sacomani, indica que una de las estrategias de consumo más alienadas con el momento es la decisión de adquirir mercaderías de segundas marcas. “Puede que se trate de una conducta cíclica, pero el comercio minorista trata de adaptarse buscando llevarle al consumidor las mejores ofertas en sus locales”, señala.

Sacomani revela que los pequeños y medianos supermercadistas están observando la evolución de un proyecto de ley que, en Buenos Aires, intenta impulsar la compra directa de fábrica, “lo que puede redundar en un mejor precio para los clientes”.

Más allá del tamaño del comercio, las familias no han dejado de concurrir al supermercado, en días específicos, con el fin de aprovechar las promociones y las ofertas.

La última encuesta de Supermercados, elaborada por el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec), ha revelado que el tucumano es el segundo consumidor argentino que más gasta cuando va al súper, con un promedio de operación de $ 239,40 por visita, sólo detrás del consumidor santafesino. La mayor parte de las compras se focaliza en artículos de almacén. La encuesta oficial (efectuada en 28 bocas de atención de supermercados instalados en Tucumán) es que, en diciembre pasado (el último dato disponible) revela además que el consumo promedio ha subido casi un 29% respecto de igual mes de 2013

Ahora bien, ¿cuánto cuesta llenar un changuito en el supermercado? Las fluctuaciones de las cifras son tal que depende de la calidad de la compra. Por ejemplo, el presidente de la Federación de ONG tucumanas, José García, calculó que una visita al súper para adquirir productos básicos (alimentos y limpieza) puede promediar los $ 850 mensuales. No obstante, si se quieren incluir otros artículos y alimentos (carne, por caso), el gasto mensual en el super puede rondar entre $ 1.300 y $ 1.500, según las estimaciones de los empresarios de la actividad. Esta es la canasta de la denominada familia tipo (matrimonio con dos hijos) que, en el último año, ha crecido en torno de un 25%. Con restricciones y todo en el gasto hogareño, las compras con tarjetas de crédito representan entre el 30% y el 40%, según el tipo de consumidor. El gasto en el supermercado representa casi el 30% del salario medio de un trabajador privado registrado de la provincia, que cobra a razón de $ 5.132 mensuales, según las estadísticas oficiales.

La tendencia

El consumo masivo arrancó un nuevo año plagado de incertidumbre. Los primeros números de 2014 ya se vieron afectados por el traslado de la devaluación de la moneda a los precios internos, indica un reporte del Centro de Estudios Económicos del Banco Ciudad de Buenos Aires. Si bien los datos de consumo en supermercados y shoppings resultaron todavía positivos, la desaceleración en las ventas ajustadas por inflación relevante comenzó a notarse, añade el informe. El incremento de precios de enero se reflejó en una desaceleración del ritmo de crecimiento de las ventas en los supermercados. Según las estimaciones oficiales, las ventas en las grandes cadenas, deflactadas por la inflación relevante, crecieron un 1,6% respecto de enero de 2013, luego de cerrar el año con una expansión cercana al 3%, existiendo relevamientos privados de consumo masivo que, incluso, hablan de caída en las ventas durante el primer mes del año. La novedad es que, como consecuencia del “sinceramiento” en los precios al consumidor, incluso los precios implícitos en la encuesta de ventas de súper que lleva a cabo el Indec arrojaron un incremento de 4,1% respecto a diciembre, por encima de la inflación mensual capturada por el flamante índice de precios al consumidor nacional urbano (IPCNu), tanto en su nivel general (3,7%) como en el rubro alimentos (3,3%), revela el informe.