CE&I – Capitalismo, Empresa e Individuo. Traducción Prof. Miguel A. Pero

CE&I – Capitalismo, Empresa e Individuo.

Texto:

RETHINKING CAPITALISM. Economics and Policy for Sustainable and Inclusive Growth. Comp. M. Jacobs – M. Mazzucato. Wiley-Maxwell 2016

Resumen y Traducción: Miguel A. Pero – Setiembre 2016.

Introducción.

  1. Jacobs-M. Mazzucato.

Las teorías y enfoques del pensamiento económico convencional (mainstream) así como las políticas derivadas, no comprenden enteramente el funcionamiento del capitalismo moderno y sus fallas. Se necesita repensar y re moldear el capitalismo vía nuevos marcos mentales y enfoques de política.

Las economías de los países desarrollados, sin objeciones ni cuestionamientos, evidencian situaciones que se resumen en:

Crecimiento débil e Inestable. Disminución de la capacidad productiva y de la innovación para mejoras en la productividad. Inestabilidad y sistemáticas crisis bancarias, cambiarias y de deuda soberana. Desempleo elevado y estable. Disminución del Salario Real.

Estancamiento del estándar de vida y aumento de la desigualdad interna. Disminución de la participación relativa del trabajo en el producto. Polarización del mercado de trabajo y mayor inseguridad laboral. Aumento significativo de la desigualdad en la distribución del ingreso y la riqueza.

Cambio climático y riesgo ambiental. El daño ambiental originado en la emisión de gases por los actuales procesos de producción, transporte, distribución y consumo pone en riesgo el hábitat del planeta y la raza humana.

Estos problemas complejos, multidimensionales y con múltiples causas no pueden ser resueltos por el pensamiento económico ortodoxo. Es necesario un re pensamiento que contemple:

  1. Un cuestionamiento a conceptos que tienen una difusión y aceptación generalizada como:
    – La austeridad fiscal como vía de reducción del déficit y el imperativo del presupuesto público equilibrado.
    – La política monetaria y el “quantitative easing” como vía de estímulo de la demanda.
    – El Cortoplacismo (Shorttermism) y la Financiarización como características dominantes del comportamiento inversor de las empresas.
    – El mercado como el factor e instrumento clave en la orientación y asignación de recursos para la innovación.
    – El sector y la inversión privada como motor impulsor de la innovación tecnológica y social.
    – La inversión pública y la intervención del Estado como inhibidor y restrictor de la iniciativa privada (crowding out)
    – La alineación de los intereses de los ejecutivos y los accionistas vía retribuciones atadas al desempeño de corto plazo y evolución en el precio de las acciones.
    – La conveniencia económico-social-política de las privatizaciones de industrias y tercerización de servicios públicos.
    – La negación del impacto de los actuales procesos de producción, transporte, distribución y consumo, en el daño y compromiso del medio ambiente.
  2. Una más acabada comprensión de la necesidad de:
    – Caracterizar en forma más rica a los mercados y las empresas.
    – Comprender que los mercados no son idealizaciones abstractas sino resultados (outcomes) concretos y diferenciados.
    – Comprender que el comportamiento de las empresas no es homogéneo sino heterogéneo y con propósitos y motivaciones diferentes.
    – Comprender que las estructuras de propiedad, gobierno y retribución e incentivos de las corporaciones influyen e inducen el comportamiento inversor (magnitud y dirección) de las mismas.
    – Comprender que el Estado es un actor clave en la innovación tecnológica con un especial protagonismo en toda la cadena de innovación desde la investigación básica, aplicada y actividades downstream.
    – Comprender que las inversiones del sector público en innovación e infraestructura deben estar orientadas por un sentido de misión-propósito de impulsar un crecimiento innovador, inteligente, inclusivo y sostenible.
    – Comprender que resolver el problema y desafío ambiental requiere una completa y estructural transformación de los sistemas de producción, transporte, distribución y consumo a base de una combinación de tecnologías de información-comunicación y tecnologías ambientales.

Cap. 02. The Failure of Austerity. Rethinking Fiscal Policy.

Stephanie Kelton.

Porqué las consecuencias de la crisis 2007/2008 no tuvieron la magnitud ni el impacto de la Gran Depresión de 1929? La pronta y efectiva reacción de los gobiernos, vías políticas monetarias y fiscales activas más la acción de los “estabilizadores automáticos” permitieron una superación de la crisis y una recuperación (aunque débil) del empleo y el crecimiento.

Desde el punto de vista monetario, se redujeron las tasas de interés, se hizo fuerte y agresiva provisión de liquidez al sector financiero y se empleó el “quantitative easing” (recompra de deuda pública con emisión monetaria).

Desde el punto de vista fiscal, se aumentó significativamente el déficit público con programas de estímulo, salvataje de empresas y bancos, inversión en infraestructura, recortes de impuestos, y auxilio a los gobiernos estadual y municipal, “los déficits salvaron al mundo”.

No obstante los defensores de la ortodoxia económica, siguen sosteniendo la necesidad del equilibrio presupuestario (público), la conveniencia de la austeridad (consolidación fiscal) y una equivocada comprensión de la relación entre déficit público y deuda privada.

Usando el marco conceptual de “Sectoral Financial Balances Approach” puede probarse que en la economía el Gasto Total es igual al Ingreso Total y lo que un Sector (Privado, Público, Externo) gasta por encima de sus ingresos, otro Sector (Privado, Público, Externo) gasta de menos a fin de compensar el flujo produciendo la igualdad. Existe una correlación negativa entre los balances financieros de los Sectores Público – Privado. Un aumento en la Deuda – Déficit del Sector Público se compensa con un aumento del Activo – Superávit del Sector Privado. De modo que ante la retracción (Inversión y Consumo) del Sector Privado en una situación de crisis y recesión, para compensar la caída en el ingreso y en el empleo el Sector Público debe aumentar su gasto, incurriendo incluso en un déficit.

Existe una correlación positiva entre desempleo y déficit público. Un aumento en el desempleo va de la mano con un aumento del déficit, (estabilizador automático) por lo que si se requiere reducir el déficit es necesario aumentar el empleo. De ahí que el déficit (superávit) público sea una variable endógena que se comporta en simpatía con las condiciones de la economía real. Conclusión, el déficit público no debería ser una obsesión, un dogma. Las políticas económicas deben evaluarse por su impacto económico-social y no su impacto en el déficit. Se debe pasar de un enfoque de solidez financiera a uno de funcionalidad financiera, o sea un uso del presupuesto orientado por una misión: Educación, Infraestructura, Innovación.

Cómo hace una economía (un país) para gastar por encima de sus ingresos, (aumentar el déficit) o aumenta los impuestos (imposible en una recesión) o se endeuda pidiendo prestado al sector privado (difícil, caro o imposible en una situación de crisis) o pide prestado a los gobiernos e instituciones supra-nacionales o, recurre a la emisión monetaria, algo lo último, que no pueden hacer los países con restricciones al manejo de su moneda y niveles de deuda (caso Unión Europea), lo que conduce inevitablemente a la receta de la austeridad y recesión. En situaciones de recesión, desempleo, exceso de capacidad, la emisión monetaria no es inflacionaria.

Cap. 03. Understanding Money and Macroeconomic Policy.

  1. $. Wray – Y. Nersisyan.

La macroeconomía NO funciona: Bajas Tasas de Interés, Crecimiento débil, Ansiedad por los riesgos de deflación. Aún con paquetes de estímulo fiscal y políticas monetarias laxas, el déficit y la deuda sigue creciendo, lo que induce la recomendación de mayor austeridad fiscal.

Hipótesis: La Política Fiscal, una herramienta más poderosa y efectiva que la Política Monetaria para combatir la recesión y estimular el crecimiento.

Bajo la perspectiva ortodoxa, con la facultad de emisión de moneda fiduciaria sin respaldo o convertibilidad legal, los gobiernos pueden financiar un gasto superior a los ingresos por impuestos y préstamos, emisión que si es mayor que el crecimiento de la producción real conduce a inflación, de ahí que se requiere control del gasto y el endeudamiento.

En la visión ortodoxa el dinero es una variable exógena, independiente, desconectada de la economía real y bajo control de la autoridad monetaria.

En una perspectiva más moderna, la demanda de los hogares y empresas por préstamos es lo que efectivamente crea dinero, lo que convierte al dinero en una variable endógena de la economía real y no independiente de la producción de bienes y servicios. Bajo esta perspectiva, los gobiernos no están restringidos a una financiación vía impuestos y/o préstamos, pueden recurrir a la emisión monetaria, dentro de ciertos límites que eviten la presión inflacionaria. Lo que importa no es la cantidad de dinero sino el nivel agregado de la demanda.

El problema entonces es que en una situación de recesión, con una demanda agregada insuficiente, tasas de interés cercanas o iguales a cero, las políticas monetarias y los ejercicios de “quantitative easing” no son efectivos para reactivar la economía y el empleo, por lo que es necesario recurrir a políticas fiscales activas financiadas por emisión monetaria.

Cap. 04. The Cost of Shorttermism

Andrew G. Haldane.

Hay una tendencia a un acortamiento del tiempo de las decisiones y procesos, una aceleración de conductas que está influyendo de un modo significativo en nuestros marcos y modelos mentales. Una expresión que se corresponde con lo anterior es una “Era de Capitalismo Trimestral”.

Se está observando en una forma muy frecuente y extendida cómo las empresas, están acortando los plazos u horizontes de maduración de sus proyectos de inversión, priorizando en forma significativa el corto plazo.

Alguna evidencia empírica de este cortoplacismo en las decisiones de inversión:

  • Brevedad de los períodos establecidos para el recupero de inversiones, de tres a cinco años.
  • Las patentes si bien no declinan en número son cada vez más de tipo incremental sin incluir innovaciones significativas o de carácter disruptivo.
  • Mayor inversión en términos relativos por las empresas de capital privado con relación a empresas de capital abierto que cotizan en bolsa.
  • Priorización de los resultados a corto plazo obtenidos vía recortes en inversiones de largo plazo.
  • Las empresas, particularmente las que cotizan en bolsa, están dedicando más fondos a la distribución de dividendos y recompra de acciones (devolución al accionista) que a la retención para reinversión interna.

Como un intento de cuantificación del costo de este foco en el corto plazo (cortoplacismo) se ha observado:

  • Una elevación en la tasa de descuento que penaliza más a los proyectos de inversión de largo plazo, induciendo el rechazo de proyectos que a una tasa menor tendrían Valores Actuales Netos Positivos o convenientes.
  • Las firmas de capital privado, que no están obligadas a conformar las expectativas en términos de ganancias y precio de la acción de los inversionistas en el mercado, invierten relativamente más (Relaciones de Stock de Activos Fijos / Ventas; Stock de Activos Fijos / Utilidades) que las empresas que tienen su capital abierto.
  • Crecimiento en la porción de utilidades que se distribuyen o devuelven a los accionistas en forma de dividendos y/o recompra de acciones.

Esta conducta con foco en el cortoplacismo y consecuentemente retracción de inversiones hace que tanto el Stock de Capital como el Output de la economía sea inferior a su potencial.

Qué se podría hacer para inducir un apartamiento de este foco en el cortoplacismo?

 

  1. Transparencia: Requerir que las empresas proporcionen mayor información sobre sus intenciones de largo plazo: Estrategia, Desempeño, Políticas de Compensación a Ejecutivos.
  2. Diseño de Contratos de Retribución a Ejecutivos a fin de hacerlos más sensibles al desempeño de largo plazo.
  3. Gobierno Corporativo. Enlace de los derechos de los accionistas (voto) a la permanencia de la inversión, tenencia de largo plazo.
  4. Imposición – Subsidios a fin de penalizar – incentivar la tenencia de corto – largo plazo, respectivamente.

Cap. 05. Innovative Enterprise and The Theory of the Firm.

Los economistas, en el pensamiento clásico convencional, no están muy bien entrenados, más bien tienen una entrenada incapacidad, para entender la relación entre asignación de recursos, crecimiento en la productividad y distribución del ingreso.

Según el pensamiento económico convencional, son los mercados y sobre todo de competencia perfecta, la vía para la más eficiente asignación de los recursos. En una competencia perfecta, todas las firmas son homogéneas, tienen la misma estructura de costos y el mismo comportamiento de la función de costo medio o unitario con una inflexión hacia arriba a un volumen (Escala mínima eficiente) que sin embargo, es muy pequeño con relación al output total de la industria. Se asume que los empresarios son alérgicos al riesgo y no están dispuestos a aumentar la estructura (Mayor Costo Fijo) de forma que no se produzca esa inflexión hacia arriba, o sea que el aumento en el costo variable unitario no sea superior a la disminución en el costo fijo unitario.

En suma, en competencia perfecta se asume que ni el emprendedorismo (asunción de riesgos por aumentar la estructura, el costo fijo) ni el management, o gestión del personal (en pro de motivar un comportamiento más productivo) juegan un rol.

Sin embargo, son las organizaciones (empresas) y no los mercados los que invierten en las capacidades de producción vía acceso al input, trabajo, materias primas, energía, capital, provistos por los mercados y son las empresas las que construyen el Capital Físico y Capital Humano base del aumento en la productividad. Son las estrategias de inversión y las estructuras organizacionales de las empresas que vía el desarrollo y utilización de recursos bajo control, impulsan el crecimiento de la productividad y con ello las mejoras en la sociedad.

La innovación es un proceso colectivo, acumulativo, incierto y son las organizaciones (empresas) las que invierten en este proceso acumulativo e incierto. Son las empresas innovadoras.

Para entender la operación y desempeño de la economía moderna se requiere una teoría de la empresa innovadora. Empresa innovadora es la que a través de un sostenido período de invertir en el proceso acumulativo y colectivo de aprendizaje organizacional, produce bienes competitivos de alta calidad y bajo costo. Para ello se requiere:

  • Control Estratégico. La empresa debe direccionar sus inversiones con los fines estratégicos de superar la competencia y ofrecer mayor valor a los clientes.
  • Integración Organizacional. La empresa debe gestionar y alinear los intereses de los empleados y la organización a fin de obtener un comportamiento consistente con las mejoras en la productividad y el bienestar de los mismos empleados.
  • Compromiso Financiero. Retención de ganancias para destinarlas a inversiones de upgrading, actualización, renovación y desarrollo de capacidades productivas y no su devolución a los accionistas vía elevados dividendos y recompras de acciones. Con el enfoque predominante en los últimos tiempos de “Maximización del Valor del Accionistas” los ejecutivos, con el fin de producir un aumento de corto plazo en el precio de las acciones, priorizan inversiones de corto plazo (cortoplacismo) y reparten dividendos relativamente elevados y recompran acciones. En una palabra se trata de una conducta de búsqueda de rentas y extracción de valor y no de creación de valor.

El enfoque teórico de la economía neoclásica de competencia perfecta y firma que optimiza sujeta a restricciones (Estructura de industria dada y Precios de Inputs y Outputs también dados, factores exógenos) no se corresponde con la historia y realidad de la empresa innovadora que supera a la competencia vía sus propósitos estratégicos que modifican en su favor, las condiciones de mercado y tecnología.

Cap. 06. Innovation, the State and Patient Capital.

Mariana Mazzucato.

Situación actual en el mundo desarrollado: Baja Tasa de Crecimiento, Baja Tasa de Inversión y Bajo Desempeño en Productividad y Crecimiento de la Productividad. Una situación de “Estancamiento Secular”, un problema endógeno originado en problemáticas elecciones tanto de empresas como de gobiernos.

Existe una comprensión equivocada tanto de, a) el origen y proceso de innovación y b) el rol del Estado como actor en el proceso de innovación.

Según el pensamiento ortodoxo, la innovación es:

  1. Llevada a cabo por el sector privado (genios individuales o emprendedores) facilitada por el sector público.
  2. De un riesgo predecible y no incierta.
  3. Tiene la misma probabilidad de ocurrencia en cualquier momento en el tiempo.

Sin embargo, la evidencia real indica que la innovación es:

  1. Llevada a cabo por sistemas de relaciones e interacciones entre heterogéneos actores privados y públicos.
  2. Incierta en términos Knigthianos, o sea con resultados impredecibles, con probabilidad no conocida exante. Existen riesgos de tecnología, de mercado y de competencia.
  3. Basada en rutinas difíciles de imitar, de carácter tácito, inmersas en prácticas organizacionales.
  4. Es de dependencia secuencial (path dependence) y acumulativa con una distribución de cola gruesa (fat tailed distribution). Ocurre en ondas y clusters.

El pensamiento ortodoxo asigna al estado un rol secundario, pasivo de: solucionador de fallas del mercado, internalización de costos y beneficios externos, fondeo de investigación básica en bienes públicos, incentivar la inversión privada y promover la competencia entre las empresas.

La evidencia sin embargo indica que, el gobierno tiene un rol muy activo en toda la cadena de innovación desde la investigación básica, a la aplicada, a la financiación en las etapas tempranas de lanzamiento, despegue y comercialización de las nuevas tecnologías.

En un amplio espectro de las modernas tecnologías desde semiconductores, internet, comunicaciones móviles, nanotecnología, biotecnología, así como también en las energías renovables y tecnologías limpias, el estado ha tenido y tiene un activo protagonismo en todas las etapas de la cadena de innovación, como financista, coordinador, orquestador y direccionador de los procesos de innovación. El estado no sólo ha cumplido y cumple un papel de facilitador y mitigador del riesgo de los emprendimientos privados sino que es un creador y moldeador de mercados en tecnología, originando oportunidades que consecuentemente son explotadas por actores privados.

En esta perspectiva de Estado Emprendedor, con la orquestación, coordinación de una cartera de proyectos de tecnología, que permita compensar elecciones fallidas con casos exitosos y orientado por misión o propósito (ej. Poner un hombre en la luna), se exige que no sólo se socialicen los riesgos, sino también las ganancias. El Estado debería participar de las rentas producidas (vía Licencias, Regalías, Participación en la propiedad) por las innovaciones tecnológicas en las que ha actuado como impulsor, fondeador y/o orquestador a fin de recuperar los fondos invertidos y posibilitar ese enfoque de cartera.

Dado el carácter incierto, elevado riesgo, acumulativo, extendido en el tiempo de la inversión en innovación tecnológica está probado que, las vías de financiación usual de proyectos en tecnología, Capital de Riesgo (venture capital) no es satisfactoria, ni en la suficiencia de los fondos requeridos, ni en el sostenimiento de la inversión. El foco en el corto plazo que caracteriza al comportamiento inversor de las empresas privadas (comentado en el capítulo anterior) impide la provisión sostenible del capital requerido por el proceso de innovación. Se necesita un capital paciente, de largo plazo y aquí se destaca el conveniente y necesario rol de los Bancos Estatales de Inversión (SIB).

Cap. 07. Investment Led Growth. A Solution to European Crisis.

Stephany Griffith-Jones ; Giovanni Cozzi.

Cuál es la situación actual de Europa?: Crecimiento lento, Desempleo Alto, Disminución de la participación de la Inversión en el PBI, Disminución de la participación de la industria en el PBI (Des industrialización) y sin perspectivas claras de mejoras en la próxima década.

No es probable que las vías convencionales para intentar la reactivación de la economía con foco en la austeridad (consolidación fiscal), estímulo a la demanda vía consumo sostenido por endeudamiento y/o aumento de los márgenes de utilidad vía estrechamiento salarial, tengan éxito en el mediano plazo.

La vía más sólida para una recuperación del crecimiento, aumento del empleo, particularmente en el Sur de Europa (Italia, España, Portugal, Grecia) es un programa de fuerte inversión pública y privada, acompañado de una moderación o retracción en las medidas de austeridad fiscal, o sea más bien una política fiscal expansiva.

En situaciones de recesión, subutilización de recursos (capacidad ociosa), bajas tasas de interés; la inversión pública, originada en mayor gasto del estado no inhibe ni excluye la inversión privada (crowding out) sino por el contrario es catalizador, apalancadora de la inversión privada (crowding in).

Un fuerte programa de inversión pública tiene como efecto:

  • Apalancar, movilizar a la inversión privada, vía compartir y mitigar el riesgo de inversiones en proyectos de maduración de largo plazo (infraestructura y desarrollo de nuevas tecnologías)
  • Rol de estabilizador compensando la retracción de la oferta de préstamos por el sector financiero privado, típico de épocas de recesión.
  • Proporcionar el capital paciente, orientado por una misión, necesario para las inversiones de elevado riesgo (tecnología, mercado y competencia) asociado a los proyectos de infraestructura, generación, desarrollo y lanzamiento de nuevas tecnologías o sea de innovación y transformación estructural.

Los autores proponen un programa de fuertes inversiones, financiadas por el Banco Europeo de Inversiones (EIB) y los Bancos Nacionales de Desarrollo (SIBs) en complementación de los ya lanzados Planes de Inversión puestos en marcha por la Comisión Europea. A fin de dar un impulso significativo a la inversión son claves, no sólo el tamaño de los proyectos como la oportunidad y rapidez de implementación.

Las vías que se sugieren para la implementación de este impulso a la inversión pública y privada son:

  1. Ampliación de la capacidad de préstamo del EIB, vía nuevos y mayores aportes de capital de los países miembros.
  2. Reorientación y redirección de los fondos del presupuesto, hacia proyectos de inversión asociados con la innovación y transformación estructural.
  3. Constitución de un Fondo Europeo para Inversiones (EFI) a fin de acompañar al sector privado, mitigando y compartiendo los riesgos asociados a inversiones en infraestructura y desarrollo de nuevas tecnologías.
  4. Acompañar el programa de inversiones con una política fiscal expansiva a fin de asegurar la continuidad de las inversiones.

Las áreas destinatarias de las inversiones tienen que ver principalmente con generación, transporte y distribución de energías renovables, tecnologías ambientales destinadas a un uso más eficiente de los recursos y generación de empleo para los jóvenes.

Simulaciones usando el Cambridge Alphametrics Model (CAM) permiten mostrar que en el lapso de 2015 a 2020, la recuperación liderada por la inversión y el aumento de la demanda consecuente, impactarán en aumento en el PBI, aumento en la participación relativa de la inversión, aumento del empleo (reducción del desempleo), mitigación del proceso de des-industrialización y mejora en las relaciones Deuda / PBI y Déficit/PBI, en mayor magnitud que las políticas actuales: Plan de Inversiones (Junker’s Plan) con  la continuidad de la austeridad fiscal (“business as usual”).

Cap. 08. Inequality and Economic Growth.

Joseph Stiglitz.

Hoy, supuestos convencionales como:

  • El crecimiento económico eleva el nivel de vida de todos los sectores de la sociedad.
  • Los beneficios que se conceden a los más ricos (exención de impuestos) se “derraman” hacia los menos favorecidos

no se verifican en las economías del mundo desarrollado, observándose sin embargo un importante y creciente aumento de la desigualdad interna.

Comportamientos de búsqueda de rentas, asociado con factores políticos e institucionales (políticas monetarias, fiscales, laborales) se asocian para impulsar este aumento en la desigualdad.

Por ejemplo, en U.S.A  (2014),  una cuantificación de la desigualdad en el ingreso (además de la convencional elevación del coeficiente de Gini) pueden mostrarse por:

  • El 1 % más rico captura el 21% del Ingreso Total
  • El 0,1% más rico captura el 10,3% del Ingreso Total
  • Entre 1973 y 2014, la productividad de la economía aumenté en un 72.2% mientras que la retribución promedio del trabajador industrial (no supervisor) aumentó apenas el 9%

También la desigualdad en la riqueza aumentó significativamente. Así:

  • El 1% más rico tiene el 42 % de la Riqueza Total
  • El 0,1% más rico tiene el 21% de la Riqueza Total.

Se observa también este aumento en la desigualdad en las etnias minoritarias: Afro-Americana e Hispana con relación a la población blanca.

Hoy los prospectos de vida de un joven americano dependen más del ingreso y educación de sus padres que de sus propias capacidades y educación. Se ha comprobado que la desigualdad en el ingreso y la riqueza está relacionada positivamente con la desigualdad de oportunidades.

Este aumento en la desigualdad se observa en casi todos los países del mundo desarrollado y también se está observando en las economías emergentes (China, Rusia, Brasil etc.).

La teoría económica convencional (neoclásica) explica que la desigualdad se origina en la compensación a productividades marginales diferentes, cuanto mayor la productividad marginal, cuanto mayor la contribución al producto, mayor la compensación absoluta y relativa. Esto que es cierto sin embargo, no tiene mucho peso en los factores que determinan la desigualdad hoy, asociados a explotación, discriminación, poder de mercado, comportamiento rentístico, factores políticos e institucionales que actúan independientemente de la productividad y afectan la productividad.

Gran parte del aumento en la desigualdad en el ingreso y la riqueza en U.S.A se debe a una apropiación de rentas (las rentas son retornos a la propiedad de riqueza y no a la creación de riqueza) por parte de dos sectores del 1% claramente identificados a) Accionistas y ejecutivos del sector financiero y b) ejecutivos corporativos de otros sectores. Ni unos ni otros obtuvieron sus ingresos, por contribuciones a la creación de riqueza y a la productividad, sino por comportamientos especulativos y ganancias de capital, así como beneficios de privilegio otorgados por el gobierno en el caso de los accionistas y ejecutivos del sector financiero y por retribuciones sin relación con el desempeño real de la empresa, sino con el comportamiento del precio de las acciones en el caso de los ejecutivos de corporaciones.

En el mundo desarrollado se observa que los retornos por rentas derivadas de la propiedad (activos financieros, tierra, propiedad intelectual) han crecido más y más velozmente que los retornos al capital productivo y el trabajo. El valor de esos activos aumenta sin que aumente la capacidad productiva de la economía, sin que aumente el salario promedio, ni la productividad media marginal.

Los factores políticos e institucionales han contribuido también en modo importante a este aumento en la desigualdad. Así un debilitamiento del poder de los sindicatos, una globalización asimétrica (movimiento de capital más rápido y con menos restricciones que el movimiento del trabajo), políticas monetarias laxas generadoras de burbujas de activos, todos han favorecido el retorno del capital por sobre el retorno del trabajo. A los anteriores se agregan también el ejercicio de discriminación y del poder de mercado (monopolios).

La desigualdad en el mundo de hoy, no cumple (como afirma la teoría convencional) la condición de necesidad para el crecimiento, originado en el ahorro y acumulación de los más ricos y en la creación por esos ricos de puestos de trabajo. En el mundo hoy hay un exceso de ahorro y por otra parte es la demanda la que crea los puestos de trabajo. Por el contrario, la desigualdad es un factor que afecta el crecimiento tanto en su ritmo o tasa como en su duración. La desigualdad:

  • Debilita la demanda agregada, disminuyen la actividad y el ingreso.
  • Implica una desigualdad de oportunidades, lo que disminuye no sólo el producto hoy sino también en el mañana.
  • Desestimula o no incentiva la inversión en bienes públicos (infraestructura, transporte, educación) afectando a los más pobres ya que los ricos no necesitan esos bienes y resisten la imposición a fin de crear tales bienes públicos.

Dado que es indiscutible el precio que la desigualdad tiene para la economía y el bienestar, son necesarias políticas que apunten a reducir la desigualdad tanto del ingreso de mercado como del ingreso después de impuestos y transferencias (ingreso disponible). En general se debe buscar prevenir e impedir la discriminación, aumentar los derechos de los trabajadores, restringir el poder de los monopolios, restringir el poder del sector financiero, reducir el foco en el cortoplacismo tanto en el sector financiero como en el corporativo. Sin embargo la acción sobre cuatro áreas es de particular importancia:

  1. Diseño de los contratos de compensación a ejecutivos a fin que la misma se desvincule de la evolución del precio de la acción y se ate al desempeño real de la firma y en términos relativos a otras empresas o industria.
  2. Políticas macroeconómicas destinadas a mantener la estabilidad de la economía y el pleno empleo. Hoy los trabajadores sufren por partida triple: Desempleo, Bajos salarios y Recorte en los servicios públicos. Se requieren programas de fuertes inversiones públicas en infraestructura, tecnología, energías renovables y educación.
  3. Fuerte inversión pública en educación, incluso de nivel pre-escolar a fin de elevar el nivel y la calidad de la educación a fin de igualar el acceso a las oportunidades, supliendo la educación las deficiencias en capacidades, antecedentes y herencias.
  4. Imposición a las ganancias de capital y dividendos, no sólo sobre base percibido, sino también devengado.

No hay incompatibilidad entre mayor igualdad y desempeño económico, no son opuestos sino complementarios.

Cap. 09. The Paradoxes of Privatisation and Public Service Outsourcing.

Colin Crouch.

Bajo la premisa que una gran cantidad de empresas actuando en mercados perfectamente competitivos, con el sólo y principal incentivo de maximizar el beneficio y sin ninguna intervención del gobierno, conducirá a maximizar la eficiencia en la producción de bienes y servicios y con ello a minimizar los costos y por ende los precios al consumidor, concluyendo en un mayor beneficio y mejor bienestar, el neoliberalismo de mercado impulsa y defiende la privatización de sectores e industrias y la tercerización de la prestación de servicios públicos. Esa premisa ha llevado a que muchos gobiernos con economías capitalistas hayan impulsado la privatización y tercerización de los bienes y servicios públicos.

En ninguno de los aspectos que justifican la producción de bienes por el estado y la prestación pública de servicios, a) Sectores o industrias considerados claves para el éxito económico nacional, b) Monopolios Naturales, c) Bienes públicos y colectivos y d) Servicios inherentes a derechos básicos de los residentes o la ciudadanía, los resultados de las privatizaciones y tercerizaciones han sido los esperados y consistentes con la premisa del neoliberalismo de mercado.

Por el contrario, lo que ha devenido e instalado es un neoliberalismo corporativo que con el pretexto de establecer el mercado en la producción de bienes y servicios públicos exhibe una estructura de competencia de oligopolio, unas pocas y grandes empresas dominando sectores e industrias claves, con restricciones a la competencia, limitada capacidad de elección por el consumidor, un gran esfuerzo de regulación, muchas veces ineficaz o inconducente por el estado y lo más negativo una creciente intromisión e influencia de las empresas dominantes en la política y un nivel de interacción entre lo público (gobierno) y privado que se aparta en demasía de los supuestos del neoliberalismo de mercado.

Por otra parte, esa estructura de competencia oligopólica, de pocas empresas dominantes, muchas demasiado grandes como para ser dejadas a los riesgos propios de una economía de mercado libre y competitivo y que requieren del auxilio y sostén del mismo gobierno, es un factor que contribuye a aumentar aún más la desigualdad en el ingreso de la sociedad haciendo que uno se pregunte si el capitalismo es en verdad y de última, inconsistente con la democracia, ya que los ciudadanos terminan siendo usuarios meramente pasivos, rehenes sujetos al  ejercicio de poder de mercado y el  creciente e influyente lobby de las empresas productoras de los bienes públicos y prestadoras de servicios que hacen a derechos básicos de la ciudadanía.

Cap. 10. Decarbonisation. Innovation and the Economics of Climate Change.

Dimitri Zenghelis.

El cambio climático producido por el calentamiento global, que se origina principalmente en la emisión de gases invernaderos (Dióxido de Carbono, Metano, Oxido Nitroso e Hidrofluorocarbono) afectará todos los niveles de la actividad económica en el mundo, con consecuencias de elevado costo en términos de Output y Consumo global.

De continuar la actual tasa de emisión de gases invernaderos, que engrosan el stock de carbono (el verdadero causante del calentamiento global) y no encarar su reducción hasta alcanzar un nivel de ascenso de la temperatura promedio global de 2° C, los impactos serán de significación ocasionados por eventos climáticos extremos (inundaciones, sequías, olas de calor, derretimiento de hielos) que producirán:

  • Ruptura de redes de infraestructura y servicios críticos afectando principalmente a regiones y ciudades costeras.
  • Mayor inseguridad alimentaria y ruptura de los sistemas de alimentación por cambios en los regímenes de lluvia y disminución de la productividad agrícola
  • Mayor incidencia de enfermedades y mayor mortalidad.
  • Desplazamientos y conflictos entre la gente por la disponibilidad y uso de los recursos.

La reducción y estabilización en el ascenso de la temperatura promedio global en el límite establecido de hasta 2°C, exige una descarbonización total en la generación de energía y en los sistemas de producción, transporte, distribución y consumo. El problema es que el capitalismo está fundado en el carbón. Los combustibles fósiles (petróleo, gas, carbón) constituyen la fuente de casi el 80% de la energía usada en el mundo y una meta de descarbonización total, o sea reducción a cero de las emisiones de gases de carbono, no podrá lograrse sin una transformación profunda y estructural de los modos de producción, transporte y consumo típicos al capitalismo y economías de mercado.

La economía ortodoxa basada en el razonamiento marginalista, la búsqueda de equilibrios estáticos y la optimización sí considera el problema ambiental. Lo hace a partir que el problema ambiental se considera una externalidad negativa de las transacciones de mercado, una falla de mercado y que por lo tanto es necesaria una intervención a través de regulaciones o principalmente, y es el curso de acción preferido, vía incentivos financieros como la imposición al carbón y tradings de permisos de emisión. Este marco conceptual de razonamiento sin embargo, no permitirá ni la escala ni la velocidad de acción requerida para el logro de las metas de reducción a cero de la emisión de gas carbono.

El problema del cambio climático y su resolución requieren una ampliación del enfoque de análisis con la incorporación de marcos conceptuales fundados en la economía evolutiva e institucional y una comprensión de la dinámica de transformación de los sistemas económicos, en especial de la innovación, su crucialidad para el crecimiento y el carácter de dependencia secuencial (path dependence) de la innovación tecnológica, de procesos e institucional.

La innovación es un factor clave del crecimiento económico, de la mejora en la productividad y de la expansión de las formas de creación de valor. Dado el carácter finito de los recursos naturales y físicos, aun contando con la innovación tecnológica que permite obtener mayor output con menor uso de recursos, lo clave para el crecimiento está en el recurso conocimiento (sin límites por agotamiento, desgaste o uso), en el empleo de tecnologías digitales de información y comunicación que impulsen la mayor eficiencia en la generación, transporte, distribución, consumo y uso de energía y en la desmaterialización de los productos y servicios.

La innovación tecnológica es el factor clave en el logro de las metas de descarbonización. La innovación, genera más innovación, en una dinámica de realimentación positiva, de reforzamiento mutuo, de derrame de conocimiento, de efectos red. La innovación no sucede como convencionalmente se modeliza en forma lineal, sino no lineal, disruptiva y discontinua. Esta dinámica, acompañada de la escalabilidad necesaria, hace que los costos de una transición a economías bajas en carbón, sean más bajos de lo esperado, e incluso potencialmente negativos.

Por otra parte, la innovación es un proceso de desarrollo secuencial, fuertemente restringido por la infraestructura de conocimientos, procesos y prácticas anteriores y existentes (path dependence). Una vez que las tecnologías, comportamientos, instituciones y activos físicos se alinean, son muy difíciles de cambiar. Hay una enorme resistencia de los actuales participantes en la red de producción, transporte, distribución y consumo.

La dinámica de largo plazo de la innovación, endógena, disruptiva, no lineal, discontinua, de realimentación positiva y refuerzo mutuo con derrames y difusión de conocimientos y tecnologías, así como su carácter de dependencia secuencial (path dependence) no son capturadas por los modelos estándares de la economía neoclásica, con foco en el razonamiento marginal, de optimización y de alcance de corto plazo. De ahí que las soluciones de mercado (carbón tax y carbón pricing) no tienen un impacto de significación para enfrentar y resolver el desafío del cambio climático. Son necesarias fuertes inversiones a cargo del estado, tanto en las etapas de fondeo de I&D como de lanzamiento y despliegue de las tecnologías hasta que se alcance la escalabilidad necesaria y se cree el mercado necesario con la suficiente oferta y demanda que permita generalizar el uso de la tecnología por su conveniencia en costo-efectividad.

También, deberán considerarse medidas de redistribución y desplazamiento de trabajo desde los sectores afectados por la disminución o cese de generación y uso de energía a base de combustibles fósiles a otros sectores bajos en carbón. Igualmente, la posición y el compromiso firme para enfrentar la resistencia de los múltiples y amplios sectores basados en la generación, transporte y uso de energías a base de combustibles fósiles. Es fundamental la consistencia en el empleo de políticas que orienten e impulsen el proceso de descarbonización.”

Cap. 11. Capitalism, Technology, and a Green Global Golden Age: The Role of History in Helping tu Shape the Future.

Carlota Pérez.

La innovación tecnológica es un ingrediente clave y crucial del crecimiento económico y mejora en el nivel de vida. La economía ortodoxa convencional (neoclásica) considera a la innovación (en una forma limitada a la innovación de procesos, desestimando la importancia de la innovación de producto e infraestructura) como un factor exógeno y que deviene en un proceso continuo e ininterrumpido, mayormente con mejoras graduales. El análisis histórico sin embargo revela que el impulso del crecimiento se ha producido a través de explosiones tecnológicas, en un tipo de proceso de equilibrio puntuado. Se identifican cinco de estas revoluciones tecnológicas:

 

  • Instalación de la fábrica, empleo del agua (Molinos) como fuente de energía. Cambios en el trabajo y el modo de vida
  • Empleo del carbón, el vapor, hierro y los ferrocarriles. Desarrollo de una clase media educada y del empleo.
  • Empleo del acero. Ingeniería pesada. FFCC transnacionales, vapores trasatlánticos. Desarrollo del comercio internacional.
  • Petróleo, Plástico. Ford y el automóvil. Línea de ensamble. Producción Masiva.
  • Intel, Semiconductor. Tecnologías de Información y Comunicación (ICT)

El análisis histórico permite observar un patrón en el surgimiento y despliegue de estas revoluciones o explosiones tecnológicas, caracterizado por dos etapas y un punto de inflexión. Primero, etapa de la instalación, en que existe un frenesí por la aplicación y difusión de las nuevas tecnologías, enteramente disruptivas del orden de cosas vigentes, afectando el modo de producir, distribuir y consumir, suprimiendo industrias y empleo, dando lugar a nuevas industrias. Es un período en que el sector financiero obtiene grandes ganancias a través de instrumentos de trading de propósito especulativo más que de creación de riqueza. La irrupción de la nueva tecnología, plantea un cambio radical de paradigma socio-económico, una fuerte concentración del ingreso y aumento de la desigualdad. Al período de instalación sigue un tiempo de recesión, un crash, una pinchadura de la burbuja, con aumento en el desempleo, baja en el estándar de vida, que exige medidas de recuperación iniciando el segundo período, el de despliegue en el que las nuevas tecnologías se difunden a través de un proceso de realimentación positiva, reforzamiento mutuo y efecto red, construyendo una trama de tecnologías convergentes.  Esto conduce a un nuevo orden de cosas, un nuevo modo de vida, mejor y más elevado y a una disminución en la desigualdad. Este proceso de despegue, recuperación y progreso hacia adelante tiene lugar en un contexto económico, social y ambiental particular que debe ser considerado en la construcción de las políticas que proporcionen una dirección coherente y estable en la explotación y aprovechamiento de las nuevas tecnologías. Se requieren medidas explicitas, consistentes con el contexto, y reformas no sólo de los sistemas de producción, distribución y consumo, sino también de los marcos institucionales y organizacionales que rigen y encauzan el nuevo orden.

En el tiempo actual, con un mundo desequilibrado, con fuerte desempleo y desigualdad, con una economía globalizada y definida limitación en el uso posible de recursos naturales, energéticos, se ha atravesado el tiempo de recesión y quiebre de la última onda de tecnología disruptiva. Inicio 1970s, auge 1990s y 2000s, recesión y punto de inflexión, 2007 y siguientes, y ahora esperanzadamente comenzaría el período de despliegue que debe tener una dirección que permita un aprovechamiento consistente de las tecnologías de la época, tecnologías digitales de Información y Comunicación (ICT); consistente con un contexto de globalización, producción flexible, particularizada, diferenciada, amenazas de la polución, calentamiento global y escasez de recursos. Esa dirección es el “Crecimiento Verde” caracterizado por la combinación de tecnologías de producción amigables con el medio ambiente, conservadoras de energía y recursos, explotando el reciclaje, el re uso, la re fabricación y re utilización, impulsados por energías renovables, limpias y con empleos dirigidos a diseño, desarrollo y despliegue de infraestructuras intensivas en información e intangibles y tecnologías digitales de información y comunicación.

En un documento separado (ver Cap. 11 – Green Growth, desarrollo, empleo y desigualdad) se ilustra y detalla la forma que asumiría ese despliegue orientado a una dirección verde, con objetivo de un crecimiento sostenible e inclusivo.

Miguel A. Pero

Setiembre 2016